Playa del Carmen, 31 de mayo de 2025.- Tras la muerte de tres venados y la destrucción de tres hectáreas de selva, además de la protesta de ambientalistas y las denuncias correspondientes contra una obra en Playacar, el caso fue atraído por la SEMA y por consiguiente la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) quien finalmente el día de ayer colocó sellos de clausura en un terreno de tres hectáreas dentro del complejo residencial Playacar Fase 2.
Como se sabe, en este predio se pretende construir un desarrollo inmobiliario perteneciente a la constructora AWA Signature, la cual en su proceso de fraccionamiento de la tierra se sobre limitó por más de 3,000 metros cuadrados, sin respetar las zonas de áreas verdes que en todo desarrollo se deben de tomar en cuenta al momento de realizar cualquier modificación.
Lo que causó más indignación entre los residentes del complejo, así como de la opinión pública, fue el video donde se ve un par de ciervos desorientados tratando de resguardarse en los escombros dejados por la devastación.
Así también la muerte de dos crías y una hembra de venado, que encendieron las alertas por lo que se colocaron los sellos de clausura por parte de SEMA de Playa del Carmen. Después una manifestación pacífica por parte de ambientalistas y residentes solicitando el alto al ecocidio hecho en la zona.
Lo que más llamó la atención fue que la desarrolladora continuaba haciendo obras de retiro de escombro y no emitir ninguna postura ante los hechos fue que por fin se lleve el caso a nivel estatal y federal.
Aunque la clausura llegó, el impacto ambiental negativo ya es irreversible, venados, aves y otras especies nativas han perdido su hogar. La vegetación fue arrasada sin miramientos ante la ambición de empresas como es en este caso LUXED Premium Properties, empresa que lidera todos los proyectos de AWA.
Agencias
